La mayoría de los deportes de contacto, en la modalidad de competición, están divididos en categorías por peso corporal para que se pueda desarrollar un combate más equitativo. Una diferencia de peso excesiva entre luchadores expertos puede suponer una gran diferencia en cuanto a potencia y alcance.

Mientras que en algunos deportes de contacto, como el boxeo, sólo permiten una pequeña desviación de unos 3 kilos de peso entre categorías, en otros, como el MMA (Artes Marciales Mixtas), la diferencia puede llegar hasta los 8 kilos de peso entre categorías.

Dentro de este afán por ir un poco más allá, muchos luchadores, sobre todo en el caso del Boxeo que, como hemos visto la diferencia entre categorías es menor, optan por bajar de peso para pelear en una categoría inferior, y justo después del pesaje intentan subir todo lo que pueden de peso para obtener una ventaja, por ligera que sea, sobre su oponente.

¿Cómo lo hacen?

En primer lugar hay que decir que hablamos de bajar unos 4 o 5 kilos para entrar en la categoría inmediatamente inferior y después del pesaje (que va de unas horas hasta un día completo antes del combate), subir entre 3 y 4 kilos. Existen dos métodos que dan muy buenos resultados.

El primero es el método tradicional de bajar peso a través de la dieta. El nutricionista deportivo valorará el gasto calórico del atleta así como el porcentaje de grasa para calibrar la pérdida de peso en esos parámetros. Este método es más seguro pues permite planificar con tiempo la carga y descarga de carbohidratos para evitar que estas fluctuaciones de peso afecten al rendimiento deportivo del atleta.

El segundo método consiste en reducir la cantidad de agua corporal del atleta los días previos al pesaje. Y justo después de este, elevar la hidratación al máximo. Esta opción es algo más arriesgada pues puede poner en peligro el rendimiento del atleta en el cuadrilátero el día de la pelea.

En cualquier caso, yo recomiendo basar la reducción de peso controlado a través de la dieta y, los días/horas previos al pesaje, recortar ligeramente la hidratación corporal para conseguir alcanzar el peso deseado sin menoscabar la integridad física del luchador, teniendo después un pequeño margen de subida de peso, posterior al pesaje, para mejorar la confianza y fortaleza del atleta.

Descargo de responsabilidad: La información contenida en este sitio está destinada únicamente con fines educativos y no es un substituto del consejo, diagnóstico o tratamiento de un médico autorizado.